La transformación digital implica la integración de nuevas tecnologías en todo nivel de una organización o institución aunado a un proceso de absorción y adaptación de estas, esto cambia la forma en la que se opera tradicionalmente y la manera de entregar y generar valor a los clientes o ciudadanos. Incluye la adopción de nuevas tecnologías, la reingeniería de procesos y la gestión de cambio además de la cultura de innovación buscando el aprovechamiento de las nuevas tecnologías adoptadas (Westerman, Bonnet, & McAfee, 2014).